Inspirado por su ubicación privilegiada, entre El Parque del Japón y El Parque del Virrey, este proyecto tiene el fin de darle sentido al hecho de hacer parte del espacio que habitamos. Su diseño sutil alude a la filosofía oriental que elogia la atención a los detalles que destacan lo esencial, generando un balance de sentidos que resultan en equilibrio. El dinamismo de la arquitectura contemporánea y la elegancia de su estilo clásico integra la naturaleza que lo rodea creando un ambiente próspero para la calidad de vida, reuniendo familias y amigos con una constante sensación de serenidad.